Por: María José Cedeño
"Es un relajante para mí ,
ademas he podido ayudar a mucha gente que ha estado depresiva" comenta Ma. Elizabeth Borja más conocida como
“Machitabé”, quién hace 31 años se inició en el mundo de la pintura y
manualidades. Tener a sus hijos pequeños no fue un impedimento para
involucrarse en lo que hoy es su emprendimiento “Carma Machitabé”.
“Una amiga me llama un día y me
dice: Oye mi hermana ha venido de Estados Unidos y tomó un curso de pintura en
cerámica, está dando cursos aquí; le conté a mi mamá y me dijo: mijita ándate si es una vez a la
semana, yo me quedo con los bebés; así comencé a pintar de a poquito” recuerda Machitabé (Elizabeth Borja).
Su primer curso le permitió
involucrarse y continuar aprendiendo, llegando a ser maestra del centro Carma sin imaginar que por diferentes
circunstancias los antiguos dueños quisieran venderlo y ofrecérselo a ella hace
10 años. Al
asumirlo como dueña quiso darle su toque personal, cambiándole el nombre. A pesar de que el centro es su negocio y ella
es maestra del mismo, siempre busca que sus alumnas se sientan bien porque
Carma no es solo un centro de manualidades, se ha convertido en un espacio de “terapia”.
“Una señora llegó arrastrando los pies y hoy en día hasta cuenta cachos; me
dice que siempre estará aquí hasta
cuando exista el lugar” menciona Machitabé.
Para
María Andrea, alumna de 46 años y con poco tiempo en Carma, es relajante tomar
los cursos, aunque asegura que el secreto está en el trato de Machitabé: “es
una persona que siempre está predispuesta a escuchar, es buena gente y le gusta
enseñar”. Similar opinión tiene Patricia Rada , una de las alumnas más
frecuentes “ A mi parecer no conozco a nadie con más paciencia y carisma”. Rada, es una de las tantas alumnas que ha
encontrado una forma de emprendimiento a través del centro de manualidades.
Para la
emprendedora es muy importante que sus alumnas puedan obtener ingresos
económicos a través de las actividades que desarrollan, “ Incentivo a la gente para que ellas vendan”.
Madre de dos hijos adultos se define como una mujer que cree en Dios, en la
familia , en la paz de este mundo y en la amistad verdadera.
Por su
lado Paquita de Carbo , amiga personal y maestra del centro desde hace 10 años comenta
que lo positivo de su gran amiga es la actitud, “ella tiene mucha paciencia,
creatividad y sobretodo imaginación”.
El
emprendimiento de Machitabé no ha afectado su rol de madre de familia, en casa
la apoyan en todo lo que sea necesario porque “a su familia le gusta lo que hace”.
Ximena
Toala , secretaria del centro , asegura sentirse
muy cómoda porque se lleva con todo el mundo y sobretodo con la dueña. “Es muy
paciente con las alumnas, enseña bien y es buena jefa” indica Toala. Flavio
Suárez (encargado del horno y los moldes) la conoce desde hace mucho tiempo “
conozco a sus hijos, esposo, es buena persona , todo aprendí aquí , ella me
enseñó todo”.
Después de tener muchos años con su centro, Machitabé espera seguir manteniéndolo porque en ocasiones ha sido difícil tenerlo en pie, pero confía en Dios que así será “sino espero sacarse el pozo , cada semana” finaliza entre risas.
Después de tener muchos años con su centro, Machitabé espera seguir manteniéndolo porque en ocasiones ha sido difícil tenerlo en pie, pero confía en Dios que así será “sino espero sacarse el pozo , cada semana” finaliza entre risas.
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