Por: José Alvarado
Las tribunas
vacías, el césped en pésimas condiciones y las carencias que se revelan
alrededor de un partido de fútbol se conjugan en la segunda categoría. El largo
camino de un futbolista profesional empieza ahí normalmente.
En nuestro país,
la Federación Ecuatoriana de Fútbol ha dividido el torneo de segunda categoría
por provincias. En Azuay, por ejemplo, la segunda consta de seis equipos. En
las provincias más grande como Guayas, hay veintidós equipos que se dividen en
tres grupos: dos de siete planteles y uno de ocho. Los jugadores de estos
equipos deben pasar muchas dificultades para llegar al objetivo de clasificar a
la primera división.
Aaron Peñafiel
fue jugador de segunda. Él perteneció al Club Social Cultural y Deportivo Espol,
que todavía consta en el zonal de Guayas en segunda. Tenía 14 años cuando fichó
por el plantel. Para él, estar en segunda
le “ayudó mucho a tener ese roce y
ritmo de juego que es más competitivo y un poco cercano al del de primera categoría.”
La segunda
categoría también es una estación de muchas amarguras en la carrera de un
futbolista. Esto se lo ha retratado en el programa de la cadena internacional
Fox Sports: ‘Atlas, la otra pasión’.
Este show ha seguido al equipo de fútbol Atlas, de la cuarta división del
fútbol argentino, durante diez años. La producción desnuda lo precario que
puede ser vivir del fútbol cuando no se logra el éxito. Jugadores, cuerpo
técnico, dirigentes, hinchas y otros personajes son los protagonistas que fungen
bajo el mismo escudo para empujar al equipo a la siguiente división.
“En el fútbol argentino hay muchos clubes que viven
esta realidad y eso se prolonga en Latinoamérica. Recibimos un apoyo
incondicional y por eso recibimos el mote de 'El equipo del continente’”, explicó el director del proyecto televisivo y, ahora presidente de
Atlas, Maxi Ambrosio en una entrevista al portal Infobae.
Así como lo manifestó Ambrosio, las fallas del sistema de las categorías
inferiores del fútbol son regionales.
Aaron comenta
que en el fútbol ecuatoriano en general deben mejorar las canchas. Cuando ha
pasado momentos difíciles por lesiones o porque no ha jugado bien, el jugador
se exige mucho más: “Somos seres humanos,
no máquinas. Ni los más grandes como Messi y Ronaldo dejan de pasar un momento
malo en su carrera futbolística. Todo está en saber siempre seguir para
adelante y tener confianza en sí mismo y cómo salir de ese momento difícil
trabajando aún más fuerte.”
Los sacrificios
han valido la pena para Aaron Peñafiel. El año pasado fue parte del primer
plantel de Barcelona Sporting Club que llegó a la final de la Serie A del
fútbol ecuatoriano. En una de las fechas claves para el equipo amarillo,
Peñafiel pudo celebrar un gol
frente al Independiente del Valle.
A pesar de las
dificultades, la segunda categoría es necesaria para Aaron. Para el futbolista “vale la pena atravesar el futbol de segunda
categoría, pero a la edad de los 14 a 17 años máximo para que el joven
futbolista tenga fuerza, ritmo, y en especial, juego.”
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